Rivas Vaciamadrid es una de las ciudades europeas que más ha incrementado su población en los últimos 40 años. Según datos censales, la evolución de su vecindario ha pasado de 652 habitantes a 97.725, tal y como reflejan los últimos registros. Y es que Rivas combina la calidad de vida del área metropolitana de Madrid con las ventajas del campo (cuenta con 350 metros cuadrados de zonas verdes, agrícolas y naturales por habitante) y las ventajas de una gran ciudad (una variada oferta de servicios e infraestructuras públicas y privadas).
Según datos de Instituto Nacional de Estadística (INE), en su último informe de mortalidad (2019), arrojó que Rivas Vaciamadrid tenía una esperanza de vida de 84,89 años, siendo de 82,61 para los hombres y de 87,03 para las mujeres. Estos datos superaron en casi un año los datos medios nacionales y casi en cuatro años la media de la Unión Europea.
El informe de indicadores urbanos de la Comunidad de Madrid de 2019 señaló que Rivas es la tercera ciudad más joven de la región con una media de edad de 38,52 años. El último informe de Urban Audit -2021- eleva esta cifra hasta los 39,3 años, siendo la tercera urbe de España en este indicador, tras Ceuta (37,9 años) y Melilla (35,32 años), respectivamente.
La tasa bruta de natalidad ripense, que mide los nacimientos anuales por cada mil habitantes, se eleva a 10,15 alumbramientos de media, siendo así la cuarta localidad española en este aspecto. El número de hijos por mujer asciende a 1,44 de media, aumentando la tendencia respecto a 2019, cuando se registraron 1,35. Así mismo, tiene la menor tasa de mortalidad por cada millar de habitantes del país con 2,92 defunciones de media. Este dato supone un incremento de medio punto respecto a 2020.
Esta situación hace la ciudad un espacio perfecto para desarrollar en ella una vida en familia con hijos, pues cuenta con una variada oferta educativa (30 centros públicos y 3 centros privados y concertados), así como infraestructuras para la juventud entre la que destacan tres polideportivos públicos y numerosas actividades e infraestructuras pensadas para la infancia y la adolescencia. Por el lado contrario, la ciudad tiene cubierta la oferta con tres residencias privadas y dos centros de día para mayores, así como un completo programa de envejecimiento activo, además de tres centros de salud (se está promoviendo la construcción de un cuarto) y el hospital del Sureste.
Se trata de un concepto urbano que destierra el concepto de ciudad dormitorio para transformarse en un espacio para dar años a la vida y vida a los años.